Actividad
Suplementaria.
¿Quién soy?
La
interrogante alude a una respuesta compuesta y subjetiva que me gustaría
sistematizar en función de su composición, en sus dos partes para conformar una
respuesta gestáltica que abarque la mayor esencia de lo que conforma mi ser, representándolo
en interpretaciones simbólicas proto y arquetípicas de la entidad que implica la
naturaleza de mi existencia o ego.
·
Quien.
El “quien” referencia al llamado de un “alguien” en un
conjunto pluralizado colectivo de un individuo particularmente el yo, ego o
ser, del cual yo me defino como ese alguien llamado del constructo social
local, mi colectivo me define como un individuo integrado a la norma del
sistema social que aporta a su misma estructura básica, definición que podría
aseverar como fuente basal pero no absoluta, agregándome como el individuo
llamado de los colectivos: social capitalista, étnico latino, religioso
cristiano, lingüístico español, cultural hispano, nación terciaria, sexualidad hetero-masculina
y al promedio correlacionado entre los anteriores.
·
Ser
El “soy”, busca la conceptualización del “ser” como la
definición sustancial del “quien” en un alguien precisado dentro de la
existencia como realidad; el “soy” que me define basa en mi ego, mi yo
compuesto por todo lo que me conforma, tanto mi cuerpo físico como mi abstracta
existencia intangible, conformando mi ser como la totalidad agrupada de mi
mente cognitiva mental y espiritual con la física corporal fisiológica en armonía
mixta de una consciencia basada en un ego inherente al impulso básico de
existencia en función del balance ineludible del placer y dolor; soy mi representación
completa prototípica de lo que muestro verbal y no verbalmente a mi realidad un
punto adaptable y obstinado en busca de conocimiento.
Definida la binaria composición de la pregunta quiero representar simbólicamente en función de lo que denomino mi “ser” sintetizado en una imagen prototípica y sistematizada en partes focales: de las que destaco la visión nublada por de desinformación asociada a una carencia de ojos, la sabiduría en función del conocimiento adquirido a mi presente en simbolización con la barba y la audición simbolizada con audífonos que imponen escuchar y canalizar el tipo de información necesaria a intereses ajenos, mas no a los saludables
Definida la binaria composición de la pregunta quiero representar simbólicamente en función de lo que denomino mi “ser” sintetizado en una imagen prototípica y sistematizada en partes focales: de las que destaco la visión nublada por de desinformación asociada a una carencia de ojos, la sabiduría en función del conocimiento adquirido a mi presente en simbolización con la barba y la audición simbolizada con audífonos que imponen escuchar y canalizar el tipo de información necesaria a intereses ajenos, mas no a los saludables
El quien soy lo defino como mi representación prototípica presente en función de una idealizada y arquetípica de la cual me referencia a mi ser actual, definido en uno vivo, humano, masculino, adulto, promedio a las normas generales, uno que en esa generalidad a la norma busca distinguirse y a la vez normalizarse a la media, en un constante limbo existencial entre el temor a resaltar y al de estancarse entre todos; soy el conjunto de mis recuerdos, mi experiencia completa, en correlación a mi parte biológica que me hace ser Drez, soy la agrupación de mis defectos y virtudes, soy el introvertido, espontaneo, asertivo, obsesivo, cauteloso, sarcástico, preocupado, amable; el individuo que sabe fingir una sonrisa autentica solo para no entristecer a un extraño, soy quien busca aprender y errar para que otros no erren, soy solitario pero no siempre, soy amable pero me cuesta confiar, soy divertido pero selectivo, soy positivo pero no conmigo, soy diferente pero no malo, soy complicado pero simple si me escuchas, soy falso porque necesitas verme normal, soy quien soy porque quiero ser asi, me gusta ser yo, me gustan mis defectos porque son los que me dan mis virtudes, me gusta aislarme porque me gusta oír mis pensamientos, me gusta hablar porque quiero que oigas mis pensamientos. Soy Drez porque mis amigos me llamaron asi, me ayudaron y aportaron en quien forme y adopte como parte de mi ser, porque soy diferente y me agrada tanto como al resto les disgusta serlo.
Soy
Drez Marm, Manuel Andrés Rodríguez Mendoza. Soy un joven adulto de 24 años de
edad, 1.75 metro de altura, 110 de coeficiente intelectual, zurdo, alérgico, panteísta,
heterosexual, obsesivo, introvertido, artístico, retraído, amable, confiable, sínico,
temeroso al olvido y posiblemente asperger y a todo eso hay mucho más, eso soy
Yo, y tengo miedo dejar de serlo.
¿Quién
quiero ser?
Esta pregunta la relaciono directamente con mi
proyecto de vida, y aludiendo a la pregunta anterior el “quien” llamado por el
deseo del “quiero” al “ser” lo manifiesto como la version arquetipica mejorada
de mi ser actual, no como un cambio en el sentido estricto de la palabra sino a
la modificación mejorada de la base actual de mi ser, siguiento el lineamiento
anterior a una representacion simbolica de una imagen idealizada de mi propio
ser en un “Yo” futuro relacionado a la trinidad de los estados de consciencia
de Freud, en un “El” un “ego” no alterno sino postpuesto optimizado en funcion
al actual en aspectos que denotan como resaltantes a un cambio directo como: la
vision nublada a una perspectiva amplia y visionaria de la realidad general, la
imposicion y procrastinacion por la libertad y creacion en sentido metaforico
la eliminacion de los audifonos y el crecimiento de barba con el crecimiento
espiritual y congnocitivo por una sabiduria mas extensa, y agregando una
introspeccion mas amplia sobre la espiritualidad y comprension de las falencias
sociiales, culturales e internas en funcion de la resolucion de conflictos
intrinsecos de la naturaleza de mi propio ser.
El quien quiero ser, es una version mejorada de mi version estereotipada de mi propio ser actual, la mera realizacion de mis metas, proyectos, suenos y promesas, alcanzar un nirvana multimodal y a la vez utopico, uno que me mantenga avanzando por temor al limbo existencial de la incertidumbre hedonista; este “El” arquetipico de mi mismo es la marca limite entre mi propio placer hedonista que me recuerda su antagonista doloroso de empuje hacia el placer en una eterna pelea extremista que tiene como unica funcion mantenerme vivo, existente, real y no como un balance armonico neutro, que solo me llevaria al aplanamiento existencial, sino uno caotico entropico de constante rivalidad entre uno y otro, recordando que la magnitud es lo ideal.